Luis Miguel se quedó en Colombia para cenar

Satisfacción total en el público asistente a las fechas programadas en el Coliseo Medplus fue lo que generó el Sol de México a su paso por Colombia. Luis Miguel demostró con esas actuaciones que su talento es la base de su carrera y que esta no tiene fecha de caducidad.

Si bien el astro mexicano ha sido objeto de todo tipo de comentarios en redes y hasta publicaciones tendenciosas que desdicen más del profesionalismo de quien las profiere, la realidad se aprecia sobre el escenario y definitivamente el sol brilló en las dos noches que le representaron una vez más el sold out que viene logrando a su paso por todos los países incluidos en la gira.

Ahora bien, cuando los fanáticos creyeron que el paso de su artista por Colombia había culminado el pasado domingo, la sorpresa estaba dada para el personal del reconocido restaurante La Cabrera Bogotá, toda vez que pasadas las 10 de la noche, el cantante de “La incondicional” apareció con parte de su equipo de seguridad para disfrutar de la carta especializada en comida argentina.

“La amabilidad es inherente a Luis Miguel, quien se mostró cordial con cada una de las personas que laboran en el lugar, sin embargo, su requerimiento fue mantener la privacidad y por tanto las fotografías personales no tuvieron cabida, pero sí interactuó al solicitar la carta y evaluar sugerencias”, indica Ángel David Acero, relacionista público de La Cabrera.

La petición del Sol de México para su plato fue una entrada de chorizo, complementándolo con los cortes más reconocidos de la gastronomía gaucha, ojo de bife, entraña, vacío y una fresca ensalada de rúgula. 

Dentro de la interacción en el lugar, pudo ver los platos que han sido firmados por otros artistas que han visitado el restaurante, como Maná, Carlos Vives, Fito Páez, y solicitó rubricar uno, a lo que de inmediato accedió.

El detalle que más emocionó a la administración de La Cabrera, fue no aceptar la cortesía de la casa, toda vez que pagó la cuenta aduciendo que había elegido el restaurante y por tanto pagaría por el buen servicio que recibió en el mismo.

Tras disfrutar de la propuesta, Luis Miguel partió del sitio con sus acompañantes, dejando la complacencia en quienes pudieron apreciarlo en vivo interpretando sus éxitos y para el personal de La Cabrera que tuvo el placer de atenderlo en sus instalaciones.

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