La frase que da inicio a esta nota significa actuar con seguridad de que lo que se dice o se hace. No se puede estar equivocado, no puede demostrarse el error.
La Selección Argentina no jugó fútbol, lo vivió que es totalmente distinto. Ya no es aquella albiceleste que mostraba su poderío y aún así en apenas 7 minutos del compromiso se colocó arriba en el marcador por dos goles ante una Colombia que solo veía jugar a Leonel Messi.
Los primeros 20 minutos le pasaron factura a Reinaldo Rueda y tuvo que pagar “la novatada” de cambiar la nómina inicialista donde Jefferson Lerma Remplazó a Luis Fernando Muriel. Afortunadamente para el combinado patrio el técnico vallecaucano corrigió el error pero entre los espectadores se sentía la tensión tras recordar aquella goleada recibida por parte de Ecuador.
No es menos cierto que algunos jugadores les faltaron compromiso, ganas y mejor visión de juego. Aunque la fórmula de la media inglesa, que consiste en que los equipos que ganan los partidos de local y empatan de visitante, se dio la inversa con el empate 2 – 2 el cuadro tricolor ha mostrado que tiene poder ofensivo pero Rueda deberá revisar la dupla central defensiva.
El próximo compromiso por eliminatoria será ante Brasil, correspondiente a la fecha 5 que ha sido pospuesta debido a la crisis sanitaria y a los problemas de orden público. La confederación deberá analizar la realización de la jornada.
Colombia, por ahora se cierra el telón de las Eliminatorias rumbo al Mundial de Qatar 2022 y llega a una posición en la tabla donde apenas está a 4 puntos del segundo lugar (Argentina) y asegura un puesto en zona de repechaje.
En las próximas horas el seleccionado realizará trabajo de recuperación y el jueves 10 de junio emprenderá su camino hacia Brasil donde se disputará la Copa America. En Cuiabá esperarán la decisión con respecto a la realización del certamen.
Hasta ahora, los cafeteros serán el segundo partido de la jornada inicial y enfrentará a Ecuador, este domingo 13 de junio desde las 7:00 pm El Estadio Arena Pantanal.
Por: Mary Sánchez
