En una reunión esta semana entre el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, y el director ejecutivo de Asoportuaria, Lucas Ariza, se ha planteado la necesidad imperiosa de demoler una parte del viejo puente Pumarejo para facilitar el flujo de embarcaciones hacia las zonas industriales del departamento.
La situación actual del puente ha generado obstáculos significativos para el desarrollo económico de la región, particularmente en la zona Oriental del Atlántico. El gobernador Verano destacó que esta medida es esencial para permitir el acceso de embarcaciones de gran calado hacia los megaproyectos industriales que se han establecido en esa área.
El costo estimado de la demolición de este tramo específico del puente asciende a aproximadamente 100 mil millones de pesos. Ante esta cifra, el mandatario departamental propuso una colaboración conjunta entre el sector privado, la gobernación y la alcaldía, en una suerte de «vaca» financiera, para llevar a cabo este proyecto de demolición.
Verano enfatizó que la demolición parcial del puente Pumarejo no solo facilitará la navegabilidad en el río Magdalena, sino que también abrirá nuevas oportunidades para el desarrollo industrial en la región. Además, señaló que la parte restante del viejo puente podría ser reacondicionada para convertirla en una zona turística, ofreciendo así un doble beneficio para la comunidad.
