Tras siete días de haber iniciado, culminó este domingo 10 de marzo el cuarto ciclo de negociaciones entre el Gobierno Nacional y el Estado Mayor Central (EMC) de las disidencias de las Farc, en San José del Guaviare.
Luego de concluir estos diálogos, las partes reiteraron su compromiso de buscar mecanismos para hacer efectivo el cese al fuego bilateral que va hasta el 15 de julio, pese a las denuncias de incumplimientos entre las partes.
Entre las conclusiones de esta etapa de diálogos se destacan, según el comunicado conjunto, la creación de un protocolo de comunicación para evitar incidentes y el contacto armado entre las disidencias y la fuerza pública durante la vigencia del cese al fuego.
También, la aplicación de un protocolo de pedagogía de los diálogos de paz, del proceso y los acuerdos suscritos entre el Gobierno Nacional y las disidencias; así como uno de comunicación para informar lo que suceda en la mesa de diálogos.
Asimismo, aparece en el comunicado un acuerdo sobre transformaciones territoriales en los departamentos de Caquetá, Meta y Guaviare y de la región del Catatumbo. También se plantea la aplicación de la Comisión Mixta Jurídica y de Garantías de Seguridad. Así mismo se mencionó un anexo al protocolo sobre la instalación de las primeras instancias locales del Mecanismo de Veeduría, Monitoreo y Verificación.
Otra de las conclusiones del cuarto ciclo fue la implementación inmediata de los acuerdos en regiones como Antioquia, Bolívar, Caquetá, Guaviare, Meta y Norte de Santander, donde se mueve este grupo armado ilegal.
Camilo González Posso, el jefe del equipo negociador del Gobierno ante el EMC, estuvo complacido con los resultados que dejó el cuarto ciclo e indicó que se ha llegado a acuerdos gracias a la voluntad entre las partes.
“Hemos dado discusiones pensando que en el corto plazo podemos disminuir las situaciones que nos han interpelado y que desde diferentes regiones plantean grandes retos”, añadió.
González destacó lo que se ha suscrito como rutas para la transformación territorial de la región amazónica y del Guaviare, de la que han salido compromisos con programas efectivos y proyectos concretos para un desarrollo sostenible y la reforestación, preservación y conservación de las zonas naturales, bajo un enfoque que ponga el centro en las comunidades ancestrales de la zona.
“Tenemos cronogramas de proyectos con fechas de ejecución para los próximos días y semanas que se aplicarán en las regiones del Caquetá, del Guaviare, de Norte de Santander e, incluso, del Cauca. El enfoque territorial abordará los temas de la tierra y de la democracia. Esperamos dar en el próximo ciclo otro paso importante”, dijo González.
Por su parte, el comisionado de Paz Otty Patiño indicó que este avance en los diálogos de paz se da justamente 34 años después del proceso de desmovilización del M-19. Patiño también aprovechó para pedirle celeridad a la mesa de diálogo en acuerdos que ayuden a sacar a los civiles del conflicto.
“No avancemos únicamente en un cese al fuego entre armados, sino que también este sea una supresión de hostilidades contra la población civil. El hambre y la necesidad de tranquilidad no dan espera. Marchemos en pos de calmar ese afán de las comunidades, para que estas tengan una realidad distinta. Ojalá ese clamor de la gente lo escuchemos todos, grupos armados y gobierno”, añadió Patiño.
Finalmente, el comisionado exortó a los congregados a llegar a acuerdos que generen avances que les sirvan a la gente. “En la paz, la principal protagonista y la receptora de los cambios es la gente, no el gobierno”, apuntó.
Tras agradecer el apoyo de entidades internacionales y religiosas del país, se indicó que la mesa de diálogos de paz volverá a reunirse a mediados de mayo en la ciudad de Ocaña, Norte de Santander, donde se escuchará a las comunidades y se continuará en el avance de la agenda para el desarrollo del V ciclo de negociaciones.
