La Superintendencia de Notariado ha buscado solucionar la disputa que se presenta tras el nombramiento de Guillermo Ávila como nuevo curador urbano N° 1 de Barranquilla. Sin embargo, este propósito ha generado una polémica luego que la superintendente Fernanda García se acercara a la entidad en compañía de la Defensoría del Pueblo, personal de la Policía y delegados de la Alcaldía de Barranquilla, para recuperar archivos de la misma. Sin embargo, los funcionarios no permitieron el ingreso.
La Curaduría No.1 está ubicada en el barrio Prado, y sus funcionarios cerraron la puerta principal para impedir el ingreso del Supernotariado la tarde de este jueves.
En vista que no la dejaban ingresar, hicieron uso de los servicios de un cerrajero que logró abrir la puerta, sin embargo, una mujer impidió el ingreso de la comisión y volvieron a cerrar con un candado.
No valió la intervención del superintendente García, pues la funcionaria que se oponía al ingreso, alegó que era “necesario esperar la presencia del curador Fontanilla y el abogado“.
“Son archivos públicos y hay una denuncia penal. Si no es posible ingresar será necesario el uso de la fuerza pública para recuperar los documentos”, explicó la funcionaria, quien llegó al mediodía de este jueves a la ciudad.
