Sebastián López Reguillo, de 25 años, es un joven cienaguero que se ha destacado por su talento y vocación hacia la música vallenata. Desde muy niño se interesó por la percusión y el canto, tanto así que ha venido trabajando arduamente para afianzar su destreza musical y alcanzar su sueño más anhelado: impactar los corazones del público, -como él mismo lo afirma-.
Poniendo en alto el nombre de su pueblo que lo vio crecer, López, profesional en Comunicación Social y Periodismo, cuenta que Ciénaga (Magdalena) es territorio vallenato, y que gracias a esto, y en especial a su familia que son amantes de este género, contribuyeron a intensificar su gusto por la música.
“La gente en Ciénaga es muy ‘Yuquera’; mis papás, mis tías por parte y parte, somos amantes a este género. De ahí me he guiado a cantar música vallenata- Soy de los que piensa que no hay mejor manera de conquistar a una mujer que con un buen vallenato-, Entonces para mí lo es todo: Respiro, desayuno y ceno con vallenato”, destacó el artista López.
Como en todos los inicios, el camino para Sebas no ha sido fácil, pues él ha batallado contra una enfermedad conocida como ‘vitíligo’, consistente en aparición de manchas en la piel. No obstante, en busca de salir adelante y hacer su sueño realidad, ha convertido a esta en su más grande motivación.
“Enfrentarse a un público que de pronto en redes sociales no ve tu problema, y una vez te ves expuesto a mostrar tu enfermedad, ha sido difícil. -Pero sabes… me gusta eso- , me gusta ser diferente, entonces me gusta llegar a la tarima e impactar a los espectadores. Ha sido la prueba más grande, pero me he considerado un artista feliz, cumpliendo un sueño”, afirmó.
En la búsqueda de hacer realidad cada uno de sus sueños, Sebas López, actualmente está haciendo música en compañía de su amigo y acordeonero Beto Villafañe. Ambos esperan llegar a un gran público y conquistar a todos con su carisma y talento.
“Ya tenemos una canción y estamos en ese proceso de poder grabarla con mi hermano Beto. Ahora mismo, mis proyectos están basados en grabar buena música”, concluyó Sebas, quien resaltó que uno de sus sueños es poder darle un abrazo al cantante urumitero Silvestre Dangond.
