La marca de juguetes Mattel que durante muchos años mostró a través de Barbie el estereotipo de mujer perfecta, vuelve a sorprender al mercado, esta vez haciendo un homenaje a las heroínas que desde la ciencia, la tecnología y la salud han contribuido a disminuir el impacto de la pandemia.
La científica británica Sarah Gilbert, co-creadora de la vacuna COVID-19 de Oxford- AstraZeneca, se convirtió en muñeca para inspirar a las futuras generaciones, expresando en una entrevista “Espero que las niñas que vean mi Barbie se den cuenta de lo vital que son las carreras en ciencia para ayudar al mundo”.
Justamente, para romper los estereotipos de aquellas áreas de estudio catalogadas como “carreras femeninas” y “carreras masculinas”, se ha impulsado a nivel nacional e internacional un movimiento para incrementar la participación de las mujeres en las carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas).
UNESCO en su informe “Descifrar las claves: la educación de las mujeres y las niñas en materia de STEM”, muestra que el 35% de estudiantes matriculados en educación superior en carreras STEM son mujeres; el 28% de todos los investigadores en el mundo son mujeres y sólo 17 mujeres han ganado el Premio Nobel de física, química o medicina en comparación con 572 hombres.
En Colombia, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación dio a conocer que 1 de cada 10 mujeres estudia en la Universidad y menos del 2% estudia una carrera STEM. Por ello, desde esta cartera se lanzó “+ Mujer + Ciencia + Equidad”, un programa para apoyar a mujeres y niñas en condiciones de vulnerabilidad en su preparación académica y profesional en estas áreas.
A nivel mundial se conformó el consorcio internacional W-STEM, que agrupa a diversas Instituciones de Educación Superior de Europa y Latinoamérica, con el objetivo de liderar acciones que ayuden a cerrar esta brecha.
La participación de mujeres en la ciencia apunta también al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que a 2030 buscan “erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todos”.
Por ello, iniciativas como las de Mattel permiten ir cambiando los paradigmas y sensibilizando a las niñas que también pueden desempeñarse en carreras como ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas para transformar e impactar al mundo.
