Como medida de aseguramiento en el servicio de agua potable, la Gobernación del Atlántico y la Policía Ambiental intervinieron 27 zonas que de manera ilegal estaban hurtando la presión y continuidad de este servicio en el sur del Atlántico.
Durante el operativo se detectaron grandes fincas, canteras y empresas con conexiones ilegales. Con ello, la línea más crítica es la que conduce el líquido entre Luruaco y Arroyo de Piedra, la cual pierde el 90 por cierto de agua durante su recorrido.
“De los 30 litros por segundo que se envían por la línea de conducción a Arroyo de Piedra solo llegan alrededor de 4 o 5 litros por segundo. Desde la empresa Aqsur estamos haciendo un esfuerzo enorme para mejorar cobertura y calidad del agua, pero no puede ser posible que en algunas zonas residenciales llegue la mitad de lo que bombeamos. Todo esto se debe al robo continuo de agua que hay, especialmente en algunas fincas que hacen conexiones o rompen los tubos para darle agua potable a los animales, riego o simplemente para dejarla correr a los jagüeyes”, destacó el director de Operaciones de Aqsur, Edwin Ortiz.
Por su parte, el jefe de la Policía Ambiental del Atlántico, Germán Bahos, invitó a los ciudadanos a cuidar el líquido y denunciar las conexiones fraudulentas, a través de la línea 123 de la Policía Nacional.
“Desde la Policía Nacional seguiremos llevando a cabo las labores de vigilancia e inspección, esperamos contar con el respaldo de la comunidad para que sigan denunciando y, de esta manera, mejorar el servicio. Este es un compromiso de todos y queremos que las comunidades cuenten con nuestro respaldo en esta lucha para llevar agua potable a sus hogares”, indicó Bahos.
Por: Liz Castelar
