La excandidata presidencial Íngrid Betancourt no ha podido regresar a Colombia “por falta de un esquema de seguridad acorde a su nivel de riesgo”, denunció ayer domingo su partido, Verde Oxígeno, que pidió al Gobierno revisar el retiro de la protección a personas que la necesitan.
En este contexto, el partido opositor denunció que “las pocas garantías otorgadas por la Unidad Nacional de Protección (UNP) y el Gobierno de (Gustavo) Petro” a Betancourt “además de ser las medidas de seguridad más bajas de los últimos años, contrastan con el incremento de la violencia política en Colombia y el aumento en los mensajes de odio e intimidaciones”.
Por eso, la formación hizo un llamado al Gobierno para que “incremente las medidas de seguridad” de Betancourt, que permaneció más de seis años secuestrada por las FARC, y de “todos los voceros de la oposición política”, quienes deben tener “garantías reales y efectivas para participar en el ejercicio democrático en Colombia”.
El pasado viernes la Defensoría del Pueblo le solicitó al Gobierno revisar con detenimiento el retiro de esquemas de seguridad, pues es una decisión que está afectando a personas en riesgo y consideradas de especial protección por el Estado.